Las islas griegas se dividen en varios archipiélagos y todos se pueden visitar principalmente en crucero, si bien son posibles otros servicios más personalizados. Son Cycladas, Dodecaneso, Jónicas, Espóradas, islas del Norte del Egeo y las del Golfo Sarónico, constituyendo todos un bello mosaico de más de 2.000 islas, de las que sólo unas 200 están habitadas. Suponen la esencia de la civilización occidental, que se puede palpar mediente la cultura, el arte y las costumbres, todo bañado por aguas cristalinas y paisajes inolvidables tanto por la naturaleza como por la peculiar arquitectura. La mitología está siempre presente, así como la hospitalidad de sus gentes.
En el mar Egeo, las Islas Cycladas son las más famosas. Desde tiempo inmemorial, la historia de Grecia pasa a través de ellas. Desde la tranquilidad de Kea hasta la animada Mykonos, las playas de fina arena de Milos o las impresionantes cornisas volcánicas de Santorini, una veintena de islas se ofrecen al navegante. Todos reunidas son Kea, Kithnos, Serifos, Sifnos, Milos, Kimolos, Siros, Paros, Antiparos, Naxos, Andros, Tinos, Mykonos, Delos, Ios, Folegandros, Sikinos, Anafi, Amorgos, Donousa, Kufonisiay Santorini. También están las Islas del Dodecaneso, hacia la costa turca y en cadena. De una sorprendente variedad de paisajes, las del norte tienen una abundante vegetación que contrastan con los pueblos de pequeñas casas cúbicas y blancas. Todas ellas son Rodas, Karpatos, Kasos, Simi, Tilos, Nisiros, Astipalea, Kos, Kalimnos, Leros, Patmos y Kastelorizo.
Ya en el mar Jónico, de Corfú a Zante, serán seducidos por una belleza sin par, fértiles y montañosas ofrecen también excelentes fondeos. El sur, mas árido, presenta una costa mas rasa, bordeada de playas y de lagunas. Un clima muy clemente, acompañado de vientos regulares y moderados, hace de esta región muy agradable. Las islas griegas del Jónico o Jónicas son Corfú, Paxos, Anti Paxos, Lefkada, Meganisi, Kefalonia, Itaca, Zakinthos y Kithira. Pero si hay alguna que llama a muchos viajeros es la isla de Creta, muy grande, la quinta del Mediterráneo, y por ello tratada como un grupo de islas. Necesita más tiempo que las demás para su visita. Habitada sobre todo al norte, el sur es prácticamente virgen y es aconsejable perderse por sus playas y lugares paradisíacos.
Para completar el recorrido, hay que resaltar las islas del Golfo del Sarónico de Atenas a Hydra, salpicado de lugares arqueológicos, de puertos y pueblos típicos. Hallarán todos los tipos de paisajes marinos del país, altas montañas desplomándose sobre el mar, costas de bajo relieve cubiertas de arbolado o rocosas y áridas. Estas islas son: Hydra, Egina, Poros y Spetses. Seguimos por las Espóradas y la gran isla de Eubea, que son excepcionales, sorprendentes, verdes y fértiles. Lejos de los circuitos turísticos, ofrecen unas aguas cálidas y cristalinas, playas de fina y blanca arena bordeadas de pinares y bosques de eucaliptos, y gran tranquilidad.
Las islas griegas de Esporadas son Skiathos, Escopelos, Alonisos y Skiros. Y por último, las del Egeo Norte, una agrupación frente a la costa de Turquía muy especial donde el turismo masivo aún no ha puesto su mira. Mantienen toda su tradición, belleza, timidez y autenticidad. Sin gran infraestructura hotelera y con una comunicación por aire y mar fluida, ofrecen todos los ingredientes para unas excelentes vacaciones. Este archipiélago está formado por islas como Ikaria, famosa por el primer intento del hombre en volar, Lesvos o Mitilini, de gran tamaño que ofrece buenas playas y paisajes rurales, Limnos, Samos y finalmente la isla de Chios, una de sus joyas más ocultas y aún por descubrir.
